“Jajaja que risa que me da, jejeje no me puedo contener” así dice la canción, pero es lo que normalmente sentimos al escuchar un chiste. Todo depende del tipo de chiste que nos guste. Pero, ¿por qué celebrar un día al chiste? Hoy en Frente a Cámara sabremos por qué conmemoramos 24 horas de dicadas a esas frases que sin duda alguna nos matan de risa.
Hoy, primero de julio en varias partes del mundo se celebra el día internacional del chiste. Una iniciativa que nace en Estados Unidos para motivar a unos y otros a hacerle el día más feliz con una imagen o frase.
Pero, por qué un día del Chiste
Los graciosos aprovechan esta efeméride para tener una excusa para hacer reír y eliminar los problemas diarios y el estrés. He ahí, la razón original de este día. Científicamente se demostró que cuando un equipo de trabajo crea una atmosfera afable y alegre las personas realizan con más gusto sus labores. Por eso que, se instituye este día como día internacional del chiste. Para que las personas rían y puedan vivir su vida más placentera, a punta de Chiste.
Por ello, técnicas como la risoterapia se imponen en el mundo aun, porque busca generar una ayuda mental y emocional por medio de la risa. No es considerada una terapia, porque no cura enfermedades por sí misma, pero se comprobó sus favores psicológicos y emocionales.
Por ser Día Internacional del Chiste, Frente a Cámara te recopila unos cuentos chistes contados por Zulianos:
LA MARISELA. Jesús Davalillo.
“A La Marisela la llama su amiga gay de los andes, y le dice: Me quiero ir a Maracaibo, y La Marisela le responde: Venite Mardita, pero ve que aquí hay mucho calor, el sol es arrechísimo. Ya en Maracaibo la amiga de La Marisela se pregunta: ¿Podemos ir al centro? Y La Marisela le responde: sí, pero hay mucho sol y calor. Las dos se montan en carrito por puesto, y grita la amiga de La Marisela: AAAAAAAH, qué bello es Maracaibo, hay estrellas fugases a las dos de la tarde. Y se asoma La Marisela por la ventana y dice: Mi almaaaaa maaaaaaaardita eso es un Zamuro incendio, yo te dije que el sol estaba arrechísimo”
BETO PARRA.
“Muchacho, estoy tan flaco, tan flaco, tan flaco que pa hacer sombra tengo que, pasar dos veces por el mismo sitio, que molleja”.
JAVIER MARGARITO BERTEL.
Un tipo que se iba de viaje y de camino al aeropuerto llega a una venta de pollo y dice: Dame un pollo, rápido, rápido, cómo esté. Le responde el vendedor de pollos: Pero señor, hay que asarlo, están crudos. Responde el hombre: Dámelo cómo esté. El Mesonero le lleva el pollo al señor, de inmediato el señor llama al mesonero le pregunta: Algún problema señor, le dijimos que iba a estar un poco crudo, a esto el señor le responde: Llavátelo, que si está cruo, imagínate que se ha comido, media ensalada y cuatro guapito”
OZIAS ACOSTA.
“Un señor que iba en un carro y se tragó el semáforo de Grano de Oro, el semáforo del Cuartel Libertador, y el semáforo del Maczul y ahí se paró, y se le pega una patrulla atrás, ya parado el carro, el policía le dice te pasaste los tres semáforos en rojo, no tenéis ni luces, ni retrovisor, qué vais a decir. Responde el señor: No sé qué pasó, yo estaba montado en la montaña rusa”.
EL GUAJIRO JAIRO.
“Llega un tipo al doctor, y el Doctor le dice: ¿Qué puedo hacer por vos mijo? El tipo le responde: Doctor estoy meando humo. Responde asombrado el Doctor: ¿Estáis meando humo? Yo nunca he visto esa vaina, pasa pa allá y te bajáis el pantalón. El tipo se saca el pene y trata de orinar, el Doctor solo ve humo cuando este orina. Le dice el doctor al tipo: Verga estáis bueno para una miniteca mijo. Bueno, nada sentáte y respondéme. Doctor: ¿edad? Tipo: 60 años. Doctor: ¿profesión? Tipo: Albañil. Doctor: ¿Hijos? Tipo: 85. Dice el doctor: ¡85 hijos tenéis!, aaaah ya se lo que tenéis vos, se te fundieron los cojones”.
